Ir al contenido principal

Sexy Hola, Hola Sexy

Es curioso que uno de hombre saluda con un "hola" más que todo a las mujeres. Saludar con "hola" a una mujer implica un cierto grado de confianza y complicidad. En mi caso resulta frecuente que me saluden mujeres que no conozco, o que apenas he visto en alguna ocasión.

Pienso que es casi seguro que cuando una señora que apenas conozco me saluda con un "hola" es por que le gusto. Una mujer que quiera guardar las distancias puede que salude con un "buenos días" o "¿que tal?". En muchas ocasiones el tono con que me dicen "hola" las chicas es un tanto sensual,o aparentando inocencia y dulzura.

Otra parte de la coquetería femenina es la sonrisa. Pero la sonrisa de las mujeres es algo que frecuentemente me desconcierta; no sé que pensar de una mujer desconocida que me sonríe. Además de que la sonrisa es una forma muy utilizada para ocultar sentimientos; estudios científicos sugieren que las mujeres sonríen ante los desconocidos como un mecanismo de defensa. (Vea: Her smile reveals...nothing).

Otra cosa cosa que me extraña es cuando a una mujer que no conozco alguien le cuenta algo gracioso, y a pesar de que yo no haya escuchado el chiste (por estar a una distancia considerable o por no haber puesto atención) quiera reírse conmigo. Como que piensan que esa es una manera de romper el hielo.

El grado de distancia emocional también se manifiesta en la forma de tratarse. En Honduras se acostumbra a tratar de "vos" a los compañeros, amigos y conocidos de cierta confianza, lo cual me parece pesado, por lo que generalmente opto por tratar a las personas de usted. Aunque el tratar a las personas de "usted" se considera anticuado por muchas personas en países como España, tampoco me siento cómodo tratando de "vos" a personas con las cuales siento distancia emocional (que son la mayoría). Por lo que no me gusta tratar de "vos" a chavitas que apenas conozco; pero si me gusta saludar a las señoras con un "sexy hola": hola usted.

CategoriaMujeres

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Como aprendí inglés

Tengo un nivel de inglés que me permite leer y escribir en ese idioma (ver mi blog Reason Prostituted ). Hay quienes me preguntan que cómo es que aprendí inglés. No aprendí inglés por medio de una institución educativa. Tampoco he vivido en Estados Unidos. Lo que me ha servido de base fueron un par de "cursos" de inglés bastante básicos. Uno consistente en un librito y un par de audiocassettes, y el otro un antiguo y amarillento libro. También tres clases de inglés que llevé en la universidad. He estado aprendiendo inglés desde principios de los 90's, en forma lenta pero persistente. En este proceso me ha servido ver películas y programas de televisión en inglés (con subtítulos), y aprender letras de canciones en inglés (también sermones religiosos). Pero lo que ha impulsado más mi aprendizaje del inglés ha sido mi interés por la lectura. El primer libro que leí en inglés fue Jelly Belly , que trata sobre los esfuerzos de un niño gordo para adelgazar. Bast

Yet another blog of mine

As if I didn't have enough blogs... Here comes Blogpil . Health pills from Honduras... . What happened with my abandoned blogs? Well. This I abandoned for son long. But still, it can serve me as a metablog: for comenting my other blogs. The philosophical ones... I abandoned them because they don't pay. Philosophy is not profitable for me. These days I am more practical. I am comited to offer value to my readers. Who really cares about my stupid opinions? Everyone has an opinion. Opinions are cheap. Anarchism, in my blog Contraeconomia doesn't pay off. I love utopias, but utopias are not practical. Critique of atheism, in my blog Reason Prostituted , didn't pay me at all. But my Sangre de Cristo blog (Blood of Christ), is better. Lately I've been exploring the issue of metaphysical prayers . My blog about promos and services of cellphone companies turned out to be very profitable. That one I'll keep up updating. The one about Honduras , in Englis

We trap God

Photo by @brianphone We trap God, hang Him in stained glass, entrance Him by organ music and chorus We bind Him by ritual, tickle Him by prayers and train Him to become our pet. And we freely make Him take off our guilt of exploiting too much, Of having too much, of wasting too much, of living too comfortably Once the desert God, jealous and wild; now an amulet on a charm bracelet. —Yorifumi Yagucchi   Sapporo, Japan. Taken from the book "Living more with less" by Doris Janzen Longacre.